Cuanta palabrería para no venir a decir nada, lo peor de todo es que se vuelve a repetir, y lo vuelven a decir y terminan diciendo lo mismo: ¡NADA!
Y la señora coherencia quedo bien atrás, en aquel camino...
Mientras me enrollo en las palabras y creo darte la razón... pero yo que lo de ser cristiana todavía no lo digiero y eso de querer opinar... solo si viviese por aquellos lados, pero es que... igual termino diciendo eso que estas pensando...NADA.
miércoles, 1 de julio de 2009
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